Luchando por amor, Revan y Bastila

Revan, un táctico y estratega militar talentoso, dirigió a la República Galáctica a la victoria en las Guerras Mandalorianas, después de asumir el comando de sus fuerzas, finalizando el conflicto en el año siguiente. Sin embargo, en la estela de su triunfo, Revan, sus leales seguidores , y el tercio de la flota de la República que permaneció bajo su control directo, se aventuraron a las Regiones Desconocidas.
Luego regresó proclamándose a si mismo Señor Oscuro Sith. Comandando a los veteranos de las Guerras Mandalorianas, Revan  le dio la espalda a la República, y sumió a la galaxia en un nuevo enfrentamiento. El héroe, aquel que había defendido a todos ahora regresaba como conquistador.

Aunque la República evitó la derrota total por dos años, gracias a Bastila Shan, el triunfo final de Revan parecía inevitable hasta que él y Malak (su aprendiz) cayeron en una trampa. A medida que una flota de la República se enfrentaba a los Sith gobernantes, un equipo de ataque liderado por Shan abordaron la nave insignia de Revan y lucharon su camino hasta el Señor Oscuro. Sin embargo, momentos antes de que se enfrentaran a Revan, Malak hizo que su nave abriera fuego sobre el distraído puente del Señor Sith. Tomado por sorpresa, Revan fue incapacitado por el ataque de Malak y luego capturado por el equipo de asalto mientras que su traicionero aprendiz, creyendo que su Maestro había sido destruido, tomó el control de su Imperio.

Shan sobrevivió y logró usar la Fuerza para estabilizar a Revan, que estaba cerca de la muerte. Esta acción creó un vínculo entre los dos, y Shan llevó a un Revan en estado de coma ante el Consejo. El Consejo usó la Fuerza para reconstruir a Revan con una nueva identidad leal a la República.

Despertando sus antiguas habilidades y encargado de revelar la fuente de la colosal flota de Malak, Revan y sus leales camaradas frustraron todos los obstáculos y adversarios a medida que él y Shan eran guiados por "visiones" compartidas hacia Mapas Estelares, donde se mostraba el secreto del poder Sith.

Durante sus viajes, Shan vigiló muy de cerca a Revan para asegurarse de que no cayese al lado oscuro. Ella pronto se encontró admirando su pasión y poder sin rival y, a pesar de sus mejores esfuerzos, comenzó a desarrollar sentimientos por él. Ella resistió esos sentimientos, en parte porque para tenían prohibido enamorarse y en parte porque ella no podía aceptar aún quien era él en realidad.

En medio de esta odisea, el grupo fue atrapado por el Almirante Saul Karath, comandante de la flota Sith, y fueron encarcelados a bordo del Leviatán. Aunque Revan y sus amigos escaparon, matando a Karath en el camino, Darth Malak confrontó a su antiguo Maestro, reveló su verdadera identidad y finalmente, capturó a Shan, la mujer que Revan había llegado a amar. Después de torturarla con relámpagos de la Fuerza, Malak eventualmente tuvo éxito al obligar a Bastila a rendirse a su odio y caer al lado oscuro. Ella se convirtió en la aprendiz del Señor Oscuro.
Con el tiempo, ella se reuniría con Revan en la cima del Templo de los Antiguos en el planeta Lehon, mas su encuentro no fue feliz. Bastila le dijo a Revan que ella había jurado fidelidad a Malak, y que ahora era su aprendiz. Ellos se enfrentaron en un duelo, que duró poco. Después de ver lo poderoso que era Revan a pesar de lo que el Consejo le había hecho, ella llegó a creer que Revan merecía ser el Señor Oscuro de los Sith. Bastila trató de persuadirlo de reclamar su título anterior, Revan se enfrentó con una decisión que podría alterar el curso de la galaxia, mas no se dejó convencer. Revan hizo la elección del lado de la Luz y rechazó la petición de Bastila. Enojada por su fracaso al convertir a Revan, Bastila se retiró a la Forja Estelar, donde ella y Revan se volverían a encontrar.

Poco después Revan y su tripulación abordaron la Forja Estelar. Malak llamó a Bastila, quien estaba usando su meditación de batalla contra la flota de la República. Aunque ella le temía al poder de Revan, Malak le dijo a Bastila que si ella lo derrotaba probaría ser digna de ser su aprendiz. Ella le aseguró a Malak que no fallaría de nuevo.
A bordo de la Forja Estelar, Revan muestra su afinidad restaurado por la Fuerza y la maestría de combate con sables de luz, casi sin esfuerzo a lo que se enfrenta y venciendo al ejército de droides de batalla y Guerreros Oscuros de Malak de la Forja Estelar. En sala de guerra de la Forja Estelar, Revan se enfrentó a Shan una vez más, con Bastila manejando el poder total de la Forja Estelar. Pero incluso eso no era suficiente para derrotar a Revan, y Bastila cedió, rogándole a Revan que la matara, a lo que él se rehusó. En vez de ello persuadió a Bastila de renunciar al lado oscuro y regresar a la luz empleando el lazo que compartían, no uno de la Fuerza, sino de amor. 

Bastila Shan: "Yo también te amo, con todo mi corazón."

Revan: "¿Ya no tienes miedo de amar?"

Bastila Shan: "¿Después de esto? No. Nada me haría sentirme más segura que ser amada por ti."

Redimida, Bastila usó su meditación de batalla para cambiar el rumbo de la batalla a favor de la República, permitiendo que la forja Estelar fuera destruida.
Revan se enfrentó a Malak, a quien intentó persuadir de volverse a la Luz, sin embargo el Señor Oscuro se rehusó, y por tanto comenzaron un combate que terminó con la derrota de Malak.
A pesar de este aparente final feliz, Revan y Bastila no estaban destinados a permanecer juntos por mucho tiempo. Un año después de la destrucción de la Forja Estelar, Revan recordó una gran amenaza para la galaxia que él había descubierto como Señor Oscuro y partió solo hacia las Regiones Desconocidas. Bastila, a través de su lazo, había aprendido algunas cosas de él, aunque no todo. Él dejó atrás a todos a los que había querido, porque sabía que llevarlos a los lugares a los que iría les traería la destrucción a todos ellos.
Sin embargo, no todo terminó allí, Bastila siguió a Revan a las Regiones Desconocidas. En algún momento Bastila concibió y dio a luz a al menos un hijo. Su línea familiar llegó finalmente hasta Satele Shan, la Gran Maestra de la Orden, que combatiría en una guerra posterior.
Unos 300 años después, la galaxia creyó que Revan nunca volvió del espacio desconocido.

Revan y Bastila, un historia, ficticia  para muchos, real para algunos pocos… ¿Real? Sí, real… ambos existen en cada uno de nosotros, no son personajes inventados, sino que somos nosotros mismos, cada uno de nosotros es luz y oscuridad a la vez, por momentos triunfa la luz, por momentos la oscuridad. A veces nos sometemos a las normas y tradiciones y a veces rompemos con ellas. Pase lo que pase y a pesar de todo, el amor triunfa, eso es lo que nos deja esta historia, muchos pueden leerla pero pocos comprenderla. El amor… Revan y Bastila se amaban, ¿por qué iban a negarlo? El sentimiento más puro que existe en el ser humano siempre busca manifestarse, al fin con el tiempo ambos lo aceptaron. Tuvieron que enfrentarse entre sí, como a veces tenemos que hacer  cosas en contra de lo que deseamos, pero al final, incluso en la más profunda oscuridad, en la Fragua Estelar, en un punto decisivo de una guerra, el amor triunfó. Y creo que no hay dudas de que siempre lo hará. Su fuerza supera todo lo conocido…
Revan parte a las Regiones Desconocidas, dejando atrás a la mujer que amaba, Bastila… sabiendo que llevarla consigo sería peligroso. En figura de que a veces, a pesar del dolor debemos dejar libre a las personas que amamos, ya que su bienestar no estará a nuestro lado. El dolor más grande del ser humano, no es no ser amado, sino haber amado y de un momento a otro, por una causa o por otra, haberlo perdido todo, eso sucedió con él, pero no por mucho tiempo. Bastila no lo iba a dejar ir solo… por el amor que los unía ella lo siguió… y aunque no se sepa que fue de ambos en esos rincones inexplorados de la galaxia, creo que es posible que hayan vivido felices en algún planeta lejano, donde su amor no estaba prohibido…